Como anécdota, podemos ver a un joven Agustín a la izquierda de la imagen. Nos quedamos con uno de los pasodobles:
Vistió de gris
y ese julio se hizo invierno para ti.
Vistio de gris
porque hasta al sol se le apagaba la esperanza,
qy, de gris.
Quisiera ver quién se acercó
igual que una alimaña pa devorarte.
Quisiera ver
quién fue capaz de dispararte.
Quisiera ver
al que te amarró de pies y manos
siendo tu paisano, querido Miguel.
Quién diría,
Miguel Ángel, quién diría
que al cerrarte a ti la boca mil más abriría.
Con tu muerte muchas manos
se sellaron con un blanco de esperanza
que la unen como hermanos.
Velarás desde el cielo
por los que dejaste aquí.
Ay, cuida de tu mare
que se te desangra a mare
por culpa de dos disparos.
Tanto es el dolor,
que pasa las noches
con esa pena llorando,
no se quita de la mente
que te están matando.
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