Los entendíos del Racataplán

Nos encontramos en el año 2004, año en el que tuve la suerte de pisar el Falla por primera vez en una gran semifinal donde Aragón quemó todas sus naves para entrar en la final con Los Inmortales con ese tan cantado pasodoble de "Yo me enamoré de ti...". En la misma sesión, actuaron grupos de gran categoría como el del Sheriff, el Canijo, Los Sindicalistas, el Libi y... Los Entendíos del Racataplán. Este coro, con un tango perfecto para el paladar sibarita, cantó un tango, no en esta sesión, sino en la primera, hacia Sevilla, concretamente hacia el barrio de Triana y su coro. Y no se puede decir más porque el tango se califica por sí solo. Una maravilla.

Compañero, ay, compañero.
El tanguillo empezaste a ensayar,
las bandurrias dieron su trinar
bajo el puente de Triana.
Hasta el río se quedó frío
cuando el cante envolvió al Arenal
y por Cai marcaste el compás
en tu plaza Santa Ana.
Sevillano y trianero,
las gargantas vibran de emoción,
mucho Cai en su corazón
y el tanguillo ya sonó.
Sevillano y trianero,
alfarero y marinero,
compases de San Gonzalo,
costalero del Tardón.
Y tu tango empezó a navegar,
titirititirititirititrán,
la goleta trianera fue bajando el río,
y a Sanlúcar llegó en bajamar
titirititirititirititrán,
que iluminó esa mañana
y hasta al coto de Doñana le entraron escalofríos.
La bahía el oírlo tembló,
la alameda un quejío soltó,
llegando a la Caleta en el puente Canal bordeó.
Con mi tango un abrazo se dio
y cantamos con el corazón:
¡Que viva por siempre Cai y viva Triana,
y que viva el tango que nos unió!
Compañero, ay, compañero.



Colaboración de nuevo de nuestro compañero y amigo Roberto Bernal