El Cascana regresa fuerte con su chirigota, tras un año pasado en el que no consiguieron pasar de preliminares con "Los indignados". En carnavaldecadiz.com se puede leer: "En el segundo pasodoble, más ¡guerra, guerra, guerra! Con tanto traslado
de la estatua de Segismundo Moré, critican a la alcadesa que gusta más
crear ocasiones para salir en las fotos que en mejorar realmente la
ciudad. Esta letra está todavía mejor que la anterior. Las trincheras se
afianzan (...) Buena chirigota. Buena idea, bien desarrollada y bien interpretada.
La enfermera les da cita para dentro de dos semanas, si los que están
colgados en el palco lo permiten, que visto lo que han gustado, pues
puede. En la consulta suenan gritos de '¡chirigota, chirigota!'".
Nosotros nos quedamos con ese segundo pasodoble:
Si le siguen dando vueltas a la estatua de Moré
le tendrán que dar una biodramina,
ese hombre qué diría si volviera a renacer:
"déjame ya fijo en una esquina
que llevo cien años subido en el pedestal
y con el jaleo todavía ni me he sentao en la silla".
Si Segismundo levantara la cabeza
y viera que es el pim, pam, pum de una alcaldesa
que lo usa para echarse otra afotito
aunque su vida a ella qué le importa un pito.
Guerra, guerra, guerra, guerra.
Se sentiría como tos los gaditanos,
unos muñecos que ella va manipulando,
que nuestro futuro y nuestros problemas
a ella le importa muy poco.
Qué importa que Cádiz se muera
mientras que ella salga en la foto.
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